Cinco semanas en India
Y deambular horas, bajo el sol más abrasador, para no comprar nada en el interminable mercado de Anjuna. Y volver a Bombay, y encontrarla más hermosa que cuando llegué, y volver a sentarme en el mismo ordenador para escribir, éstas, las últimas tonterías de un viaje acojonante.
Lo cuenta Cabezosaurio
|