El gato del rabino: 3. El exodo
Un buen día, el gato del rabino de Argel decidió que no aguantaba más a aquel pájaro parlanchín, así que se lo comió de un bocado. A partir de ese momento, el felino disfrutó de la capacidad de hablar. Aprovechó este don para poner en jaque a su dueño, rebatiéndole de forma lógica los preceptos de la religión judía.
Este es el punto de partida de 'El gato del rabino', una serie de cómics dibujados y escritos por Joann Sfar, uno de los mayores talentos que han surgido en el mundo de la historieta en los últimos 10 años. Entre sus trabajos más destacados se encuentran también 'El gran vampiro', 'Profesor Bell' y (en colaboración) 'La mazmorra' y 'La hija del profesor'.
En este tercer capítulo del gato del rabino, titulado 'El éxodo' (Norma, 2005), el gato, el rabino y su hija viajan a París después de que esta se case con un joven rabino francés. Desde el primer momento, el rabino se encuentra extraño en esta ciudad, y decide dejar a los jóvenes enamorados en casa de los suegros de su hija. Mientras, el gato (que ya ha perdido la habilidad para hablar pero entiende mejor que nadie a su dueño) y el rabino se pierden en la lluvia, duermen en una iglesia y encuentran al sobrino de este último, que se gana la vida haciéndose pasar por árabe y cantando en las calles.
El rabino duda sobre sus creencias y sobre lo rígido de los mandamientos del sabbat. Al final comprenderá, como apunta el prólogo del comic, escrito por el cantante Georges Moustaki, que lo hermoso es entender a todas las personas y a todas las religiones; la convivencia y la tolerancia.
Tenemos, por otra parte, la encantadora narración sobre los primeros días de casados de la hija del rabino y su esposo, marcada por el encanto y el cariño.
+ INFO:
- Joann Sfar en la Wikipedia
- Entrevista a Sfar en La carcel de papel
Xx

Durante este tiempo,
Y aquí se creo una dependencia entre Windows y los fabricantes de hardware y software que raya con lo mafioso y enfermizo: Intel necesita que Microsoft lance nuevos sistemas operativos para poder vender su nuevo chip de 64 bit, al tiempo que los productores de ordenadores quieren una nueva excusa (ya que el sistema operativo se vende ya instalado en el equipo) para volver a venderte un nuevo equipo y los creadores de software desarrollan versiones más espectaculares de sus programas solo para ponerle la pegatina de 'compatible con Windows XXX'.
A principios de los años 80, los hermanos Gilbert (Beto) y Jaime Hernández daban el pistoletazo de salida al renacimiento del cómic underground con la publicación de su serie
Una de las mayores alegrías que me he llevado en estos últimos años fue descubrir, como se deben descubrir las cosas, como por casualidad
Vuelve el chico prodigio. Todo el mundo ha destacado (no es difícil) que este nuevo disco es una especie de continuación de 'Odelay'. Realmente parece que fuera grabado en las mismas sesiones de aquel trabajo. Uno de los problemas es que el referente no se grabó hace dos o tres años, sino hace nueve. ¿Y no ha cambiado nada desde entonces? Pues sí: Beck mantiene la frescura, pero ni las melodías ni las locuras y atrevimientos se parecen a los de aquel disco. 'Guero' es chulo, molón y agradable, pero da la sensación de que podría hacer un disco así cada año (lo cual no está mal) sin mucho esfuerzo, pero que nunca dará otro salto hacia delante. Casi confío más en sus discos folk.
Bufffff. Qué cansancio me provoca este hombre. Empezó (o lo conocí) haciendo techno acelerado y algo horterilla, luego se convirtió en uno de los nombres más conocidos del ambient, se hizo famoso mezclando cyberdelia y folk primitivo norteamericano, se pasó luego a las guitarras... y por el camino aprendió cómo conseguir un sonido moderno y agradable y perdió casi todo lo que podía tener de interesante. Igual no molesta (a mí, algunos momentos sí), pero es que no tiene na-da. Aséptico.
Se supone que esta buena mujer es uno de los referentes del admirado Devendra Banhart (por cierno,
Florentino Pérez no hubiera tardado tanto en decidirse. El mismo lunes por la tarde hubiera anunciado que el nuevo Papa era Joseph Ratzinger, a partir de ahora Benedicto XVI. Está claro que es el más conocido, el único del que la gente se ha aprendido el nombre y el que más camisetas va a vender.
Lo de ayer, el inicio del Cónclave que debe elegir al nuevo Papa, fue un auténtico espectáculo. Primero la misa de Ratzinger, un auténtico discurso electoral que durmió a más de uno de los cardenales. Dicen que Ratzinger es conservador. Yo creo que es un romántico: solo así se explica que este hombre siga hablando del marxismo y el colectivismo como enemigos de la religión. Luego, el paseo por la Capilla Sixtina (¿Qué bonita, no?) cantando el 'Veni, Creator Spiritus' (no todos, eh? Alguno no se lo sabía) y el juramento de cada uno de los 115 electores.
Pero quedaba un golpe de efecto. Se desconocía si durante la tarde se iba a producir una primera votación. En caso afirmativo, el resultado se debería haber dado a conocer a las siete de la tarde. Sin embargo, en un nuevo ejemplo de dominio del tempo y el suspense, fue justo a las 8 de la tarde cuando la fumata asomó por la chimenea de la Plaza de San Pedro.
Después de unos años (una vez que Google se popularizó) en los que parecía que en Internet no ocurría nada, en los últimos meses parece que se están popularizando una serie de programas/webs/utilidades que solo utilizaban unos cuantos techies: los blogs/fotologs, la
El instituto es una época extraña: divertida pero difícil. Hay una continua sensación de cambio, tanto físico como intelectual y emocional. Muchas veces uno se siente como un ser extraño; ahora social, ahora antisocial.
De resaca total. Esta es la impresión que se han llevado las dos personas que conozco que han ido al preestreno de
El personaje Señor Jean, cómic obra de los guionistas y dibujantes 
Un disco a medias con su esposa ('Home', 2004), y una banda sonora ('Clara y yo', 2004) han preccedido a la edición de 'A L'Origine' (Virgin-Emi, 2005), un nuevo paso adelante en el que añade guitarras y bajo rock a sus ambientes entre decadentes y románticos: música extraña y compacta.
Los bloques de texto están separados por los dibujos de Eduardo Arroyo, que también ilustran la portada y contraportada de este primer número en el que, además de textos de creación, podemos encontrar un discontínuo diario de Lorenzo Silva, una reflexión de Sergio Pitol sobre los libros que le llevaron a convertirse en escritor, un avance del nuevo trabajo de Chuck Palahniuk y una agenda de actos culturales (incluso deportivos) para los próximos tres meses en Europa.
Guillermo Scott Herren, más conocido como 






