2005/09/15

Gran Vampir: Cupido pasa de todo, de Joann Sfar

El amor es de lo más extraño (¿lo más?). Incluso entre vampiros y brujos. El francés Joann Sfar concibió al vampiro Fernán para un público infantil-juvenil. Así, gran parte de sus álbumes están siendo editados de cara a ese público en España por Alfaguara como Pequeño Vampir. Sin embargo, el autor de El gato del rabino también se ha imaginado cómo sería su personaje una vez pasados los años. Gran Vampir: Cupido pasa de todo (Sins Entido, 2005) es un hermoso cuento sobre el amor no correspondido.

Que nadie se deje engañar por unos personajes simpáticos y de trazo sencillo. Sfar desdramatiza, pero las situaciones (y algunas frases) no tienen nada de inocente o infantil.

Una pareja que se separa (Gran Vampir y Lio, un árbol viviente) da comienzo a la historia. A partir de ese momento veremos como ella intenta recomponerse con un gran árbol viviente al que no quiere, y como los paseos nocturnos de Fernán le llevan a conocer a dos curiosas hermanas: una bruja (Josamicina) y otra vampira (aspirina). La segunda se enamora perdidamente del vampiro y le atosiga, convencida de que logrará que cambie de opinión sobre ella.
- ¿Me quieres? pregunta ella
- No reponde él
- Yo a ti sí.

Xx